Levantarte con una sonrisa cada mañana es posible, la virtud de vivir el día día intensamente es algo realmente apetecible. He aprendido y estoy aprendiendo, que debes rodearte de gente que te aporte no que te reste, que debes dejar a tu alrededor a quien de verdad le importes. Que cada día te deparara algo nuevo, disfruta de lo efímero, porque lo bueno si es breve dos veces bueno.
Coge los momentos con quien deseas con avidez y las adversidades que vengan déjalas que se desmoronen por su propio pie. Estoy aprendiendo pues, que mas vale arrepentirse por lo realizado que por lo nunca hecho y después tener que torturarme imaginando que hubiese pasado; aprendiendo a quitarme el miedo a lo desconocido, a no saber... porque más vale quedar de tonta un segundo que toda la vida...
Aprender a evadir las críticas malas, a coger las buenas con fuerza y aferrarme a ellas. A quererse a si mismo porque si tu no te valoras ni quieres, no pretendas que los demás lo hagan...
Y lo mas importante... Aprendiendo que quizás NO, que probablemente ser FELIZ no sea un derecho sino una OBLIGACIÓN.
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